CUANDO EL TRABAJO ES UNA CARGA

Por Dra. Susana Buen-Abad
Director de Desarrollo Humano Consultores

trabajo_cargaEl trabajo es una actividad manual o intelectual retribuida, que implica un esfuerzo voluntario donde se ponen de manifiesto todas mis habilidades y destrezas de tal manera que pueda ganarme dicha retribución.

Muchas personas viven quejándose de que no hay trabajo, pero cuando lo encuentran quieren ganar mucho y trabajar poco, que pasa con ellos, acaso no merecen “ganar mucho” claro, pero a cambio de algo, la empresa no es beneficencia pública. Hay un dicho que dice: “Tú haces como que trabajas y yo hago como que te pago” y viceversa.

Desde el punto de vista del directivo o jefe, cuando tenemos gente así, resulta realmente difícil lograr los objetivos, pareciera que los colaboradores son más un ancla que un motor que nos lleve hacia adelante, la causa por la que la gente no da lo necesario o lo suficiente, se puede deber a alguna de las siguientes causas: No sabe, No puede o No quiere, pero cómo saber cuál de estas es la causa de la ineficiencia, bien, es necesario evaluar al personal en cuanto a sus destrezas, habilidades y capacidades, así como en sus actitudes, una vez localizado el problema tenemos resuelto el 50 % del mismo.

Si una persona No sabe se le enseña, se le educa y se le informa de tal modo que le sea posible desempeñar sus funciones en forma adecuada (manejar un sistema, operar una maquina, etc.).

Si una persona No puede, se le capacita y adiestra de tal modo que con la práctica obtenga la seguridad necesaria para realizar sus actividades con mayor eficiencia (dirigir gente, planear proyectos, tomar decisiones, etc.).

Si una persona No quiere, se le motiva, se le guía, para que pueda lograr tener el impulso y el deseo que le permita hacer con gusto lo que hace (esto se aplica a cualquier nivel organizacional).

La parte más difícil de esto es la motivación, lograr que alguien quiera hacer algo y con gusto. En este caso encontramos directivos, gerentes, jefes, supervisores, operarios que se sienten fastidiados de hacer lo mismo, día a día, periodo tras periodo, año a año, etc.

¿Cómo hacer para que vuelan a sentir entusiasmo de nuevo, habrá que ahondar en cuáles son sus valores personales, el dinero, el status, su desarrollo profesional, la familia, etc. Es frecuente que perdamos de vista el objetivo a nivel personal y ello nos lleve a sentirnos obligados con otros, por un contrato, por la necesidad de mis deudas, etc.

Existen cursos de desarrollo profesional, en los cuales se emplean técnicas muy efectivas para este efecto, donde cada uno de los participantes en forma privada y confidencial, evalúa su vida, sus valores, principios, detecta cuáles son las actitudes que le han ocasionado tal malestar, que percepciones o paradigmas lo fueron orillando sin darse cuenta a una situación en la que el trabajo era desagradable y monótono, con lo que mis capacidades y habilidades se fueron adormeciendo casi sin notarlo.

Durante este proceso, por demás personal y arduo se logra desvanecer toda la carga emocional que convirtió al trabajo en eso, trabajo, con un tinte de molestia y rechazo, al final del mismo, el participante obtiene una nueva perspectiva de sí mismo y de su misión esto le permite poder establecer o ratificar sus objetivos personales encontrando de nuevo un sentido a su vida, su puesto, su esfuerzo, porque ahora tienen una nueva dirección.

Esto garantiza una nueva actitud hacia su trabajo que no solo será benéfico para la empresa al ver incrementada su eficiencia en forma rápida y duradera, sino que hará que la persona encuentre su realización en el trabajo cotidiano, el mismo, que días atrás le resultaba tan molesto.

Cuando vivimos trabajando y éste resulta deprimente y nada estimulante, tenemos dos opciones solamente, resignarnos a seguir así o hacer algo al respecto, usted decide, es su vida y es su trabajo.

Cuando trabajamos con colaboradores que parecen nunca estar satisfechos con lo que se les da y usted nunca está satisfecho con lo que aportan y se esfuerzan, también tiene dos opciones resignarse o hacer algo al respecto, usted decide, son sus empleados, su departamento y/o su empresa.

Si piensa que es muy difícil, que es muy caro, que no se puede, lástima, pues son solo paradigmas, percepciones de limitación, pero si piensa que es posible, que se puede hacer y que hasta resulta barato comparado con el beneficio, excelente, pues no importa lo que piense, si se puede o si no se puede, de cualquier modo tiene la razón. Usted decide.